Ever: La apicultura es mi pasión

En el pequeño pueblo rural de Somoto, Nicaragua, vive Ever Ríos, conocido localmente como “el apicultor”.

La agricultura ha sido parte de la familia de Ríos desde que tiene memoria. El agricultor de 19 años y de cuarta generación siempre ha ayudado a su padre a cultivar frijoles y maíz. Pero Ever siempre ha tenido una conexión especial y pasión por las abejas. Desde que era niño, Ever siempre se sintió atraído por los pequeños insectos y quería explorarlos con más profundidad.

Él recuerda como si fuera ayer cuando escuchó por primera vez sobre el programa SAT. Un primo que trabajaba allí habló muy bien sobre el programa y cómo estaba ayudando a los jóvenes en el desarrollo rural. Siempre había soñado con hacer algo por su cuenta y decidió inscribirse. Dos años después, se graduó del programa, donde aprendió técnicas de trashumancia entre otros métodos agrícolas innovadores. Ahora Ever con nuevo conocimiento adquirido, no solo ayuda a su padre a mejorar sus técnicas de cultivo, sino también a producir miel 100% orgánica y de alta calidad, y cómo mantener abejas y colmenas saludables.

A través de Fabretto y gracias a un proyecto financiado por el Fondo Multilateral de Inversiones (FOMIN) y el Fondo Especial Japonés para la Reducción de la Pobreza (JPO), 10 colmenas fueron donadas para ayudar a aumentar la producción de miel, dándole la oportunidad de generar más ingresos. “Inicié teniendo solo 6 colmenas y ahora tengo 16 gracias a Fabretto. En el 2017, produje un total de 160 litros de miel”. Él tiene la esperanza de que este año podrá duplicar su producción y las ventas de ellas. El programa SAT de Fabretto, sin embargo, va más allá de la donación de recursos. A lo largo del programa, Ever adquirió habilidades que son críticas para la gestión empresarial, como las ventas, el marketing y la contabilidad. El programa le enseñó técnicas eficientes para cosechar mejor miel y cómo elegir materiales para apoyar de mejor manera las colmenas.

“He tenido muchos cambios positivos en mi vida gracias a Fabretto. Tengo una dirección clara en la vida, mi pasión por la apicultura me mantiene enfocado y decidido a hacer grandes cosas para mí, mi familia y mi comunidad. Este programa me ha enseñado el valor del trabajo y los efectos positivos de la integración comunitaria.” Expresa con orgullo su esperanza de ayudar a su comunidad y ayudar a los demás, al igual que el Padre Fabretto.