29-1-16 | Historias de Éxito
En 2014, destacamos la labor de Kevin Marinacci por las grandes contribuciones a esta obra durante los últimos 25 años. Desde que llegó a Nicaragua como voluntario en 1989, Kevin ha dedicado su vida entera a los más necesitados y a la construcción de un futuro mejor para miles de niños en Nicaragua.
Con una dedicación y liderazgo ejemplar, una firme visión y perseverancia, Kevin ha sido clave en el crecimiento de Fabretto, donde en los años noventa se atendía a 300 niños y actualmente son beneficiados más de 18,000 niños, niñas y jóvenes. Su compromiso con la niñez nicaragüense continúa transformando vidas e inspirando a otras personas de todo el mundo a unirse a esta causa.